Mientras más pienso en esta frase, más ideas llegan mi cabeza. Nunca deja de ser increíbles todas las cosas que podemos sentir, vivir, disfrutar y crear.
miércoles
a la capital
Pero si hay algunas cosas con las que nos topamos y deben ser compartidas.
Primero quiero agradecer al personal de ELJ, que nos recibieron en su casa de la mejor manera y supieron motivarnos para ser mejores.
Me encantaría tener más imágenes sobre la exposición de Warhol, pero lastimosamente no se permitían las fotografías, pero s continuación quiero compartir algunas frases de este gran personaje.
“Si quieres saber algo sobre mi obra hay que mirar la superficie de mis cuadros. Detrás no hay nada”.
“Soy una persona especialmente pasiva. Acepto las cosas tal como son. Tan solo miro, observo el mundo”.
“Hoy en día, si eres un truhán, aun puedes estar bien considerado en las alturas. Puedes escribir libros, salir en la tele, conceder entrevistas: eres una gran celebridad y nadie te desprecia por ser un ladrón. Aun estas en las alturas. Esto se debe a que lo que más quiere la gente son estrellas”.
A continuación les dejo unas tres imágenes, de esas cosas que son parte de nuestra sociedad; como dije antes, hay otras cosas que quisiera compartir, pero no es el medio, otra vez será.
EN UNA PRESENTACIÓN
El otro día, en mi clase de taller de proyectos, mis compañeros y yo realizamos las diferentes exposiciones de nuestros trabajos. Durante las exposiciones me di cuenta que ni yo ni ellos estábamos teniendo la atención que hubiéramos deseado, así que empecé a tomar nota de algunos de nuestros errores al momento de exponer.
Muchas veces como estudiantes tenemos que exponer sobre diferentes temas y, siempre conocemos más del uno que del otro; sin importar cual sea el caso, por lo menos debemos estar seguros de tener claro el tema y el pensamiento que tenemos frente a este. Si te contradices frente a tus compañeros, te joderan un rato; si lo haces frente a un cliente, podrías perder una cuenta.
El momento que empezamos a leer lo que hemos escrito en las diapositivas, el espectador va a empezar a hacer lo mismo y, si nosotros nos detenemos a hacer una explicación, no tendremos la atención del público ya que este va a estar concentrado leyendo. Al momento de presentar un proyecto, no solo estas vendiendo una idea; también, estás vendiéndote a ti como persona y a tus servicios como diseñador.
Frente a un posible cliente, no solo hables del proyecto, cualquiera puede presentar una idea si es que está bien planteada; debes hablar del porque lo estás haciendo, de lo que te mueve a trabajar, así mostraras que eres el indicado para ese trabajo.
Cuando planteas un proyecto, en el área de diseño, siempre es bueno analizar los productos relacionados, sin dudas nos encontraremos con productos buenos y malos; no importa con que te encuentres, no ataques a esos productos, no hables mal de ellos, siempre hay maneras más sutiles de referirse a algo que está mal. Cuando hablas de un producto, que no es tuyo, de una manera negativa, te conviertes en un agresor, eso no te dará puntos con nadie.
En una exposición de mucha duración, tanto tú como el público se va a cansar, pero tú no tienes excusa para demostrar ese cansancio, siempre muestra el mismo ánimo y sobre todo muestra que los puntos tratados al final de la exposición son iguales o más importantes que los primeros. No le des al espectador una buena razón para aburrirse.
Cuando una presentación usa imágenes es más llamativa, más interesante, eso te dará mayor atención del público, ellos siempre querrán saber que quieres decir con las imágenes; probablemente es una de las mejores herramientas para llevar a cabo una buena exposición. Pero para lograr esto debes usar la imagen correcta, si usas una mala imagen, esta será criticada y perderás atención, si usas una muy buena imagen, esta será admirada y también perderás atención. No es fácil, toma tiempo, pero usar la imagen correcta para ejemplificar algo en una presentación, rendirá frutos.
Frente a mucha gente esto es fácil, pasea tu mirada por el lugar y así todos sentirán que les estás hablando, y de vez en cuando dirígete a una persona específica, para recalcar en ese sentimiento. Frente a un público pequeño, hablar mientras miras a los ojos de alguno de los espectadores y mirar a diferentes personas durante la exposición, es la mejor manera de mantener a todos despiertos y atentos. En un grupo pequeño, a algunos no les importara lo que dices, pero nadie querrá que te des cuenta de eso, salvo una que otra excepción debido al descaro de algunas personas.
TÚ TAMBIÉN DEBES SER INTERESANTE
Como dije anteriormente, no solo estas vendiendo una idea o un proyecto, te estás vendiendo a ti también, como diseñador. Esto es importante ya que lo último que queremos es plantear un proyecto y ver como alguien más lo realiza.
Estas reflexiones sobre lo que se debe hacer y mejorar en una presentación son bastante personales, han sido inspiradas en comentarios y consejos que me han dado mis profesores y, quería transmitírselas con la esperanza de que les ayude de alguna manera.
UN PERRO ANDALUZ
ARGUMENTO
La película comienza con el rótulo "Érase una vez". Un hombre (Luis Buñuel, como actor) afila una navaja de afeitar mientras observa, asomándose al balcón, cómo una filosa nube corta la luna. Del mismo modo, él secciona el ojo a una mujer.
Nuevo intertítulo: “Ocho años después”. Un ciclista (Pierre Batcheff) pedalea por una calle desierta. Está ataviado con unos estrafalarios complementos: manteles blancos, tocado de monja, una caja a rayas diagonales a modo de colgante sobre el pecho... En tanto la joven de antes, que estaba leyendo, siente algo y se levanta, tirando el libro al suelo, que se queda justo abierto en una reproducción de La encajera, de Vermeer. El ciclista se detiene y cae golpeándose la cabeza bruscamente contra el canto de la acera. Ella corre escaleras abajo y lo besa frenéticamente.
De vuelta a la habitación, dispone las ropas del ciclista encima de la cama, como recomponiendo la imagen del cuerpo. Al darse la vuelta, ve al mismo hombre mirando las hormigas que surgen de un agujero negro de su mano. Mediante fundidos encadenados, se transforma en el vello axilar, un erizo de mar y en un grupo de personas que rodean a una mujer de apariencia andrógina que tantea con un bastón una mano cortada que yace en medio de la calle. Un policía recoge la mano, se la entrega y el andrógino la mete en la caja de rayas diagonales que llevaba el ciclista. La gente se “disuelve” y un coche atropella al andrógino, dejándolo en el suelo inerte.
El hombre y la mujer han visto toda la escena desde la ventana de la habitación, y la muerte y atropello del andrógino causa al hombre una gran excitación sexual, que le lleva a perseguir a la mujer al ritmo de un tango para acariciar sus pechos, que se funden en nalgas. Cuando le vemos, sus ojos están en blanco, su rostro en éxtasis y de su boca chorrea una baba sanguinolenta. Para defenderse ella le amenazará con una raqueta triangular, y el hombre busca algo a su vez, encontrando una cuerda en el suelo, pero al tirar de ella están atados dos trozos de corcho, dos frailes maristas y dos pianos de cola con sendos burros putrefactos encima. La joven emprende la huida, pero al cerrar la puerta atrapa la mano del hombre de la que brotan hormigas. El cuarto al que accede la muchacha es idéntico al de antes y tumbado en la cama aparece el ciclista con los ropajes de antes.
Nuevo rótulo: “Hacia las tres de la madrugada”. Un hombre con ademán autoritario ordena al hombre de las ropas extravagantes que las arroje por la ventana. Después, como en un castigo escolar, lo pone de cara a la pared y carga sus brazos en cruz con libros, que pronto se transforman en revólveres con los que tirotea a su doble, que cae contra la espalda desnuda de una mujer en un parque, de donde es recogido por transeúntes que por allí pasean.
La mujer entra en la habitación y ve en la pared la Acherontia atropos, una mariposa cuyo tórax tiene un aspecto semejante a una calavera; y también al hombre, que carece de boca y que es sustituida por el vello de la axila que acaba de desaparecer de la de la muchacha. Esta abre la puerta y accede directamente a una agreste playa, donde aparece un nuevo joven con el que pasea, encontrando a su paso los adminículos del ciclista.
Un nuevo rótulo “En primavera” aparece sobreimpresionado en el cielo donde se ve un paisaje desierto en el que están enterrados hasta el pecho el hombre y la mujer, según concluía el guión original, «ciegos, con los vestidos desgarrados, devorados por los rayos del sol y un enjambre de insectos».
Este argumento es de un corto escrito, producido y dirigido por Luis Buñuel, con la ayuda de Salvador Dali en el guión; yo creí que conocía a gente tostada, pero esto es otro nivel (cabe recalcar que no veo el corto todavía, solo leí y me imagine el argumento).
Por cierto, si tienen a alguien a su lado, les recomiendo que le pidan que les lea el argumento mientras ustedes se lo van imaginando.
Gracias wikipedia y jboroto, dos enciclopedias que conozco, que están llenas de conocimientos que no sirven para nada, jajaja